Abbas: Palestina ya no está limitada por los acuerdos israelíes y estadounidenses

El mandatario palestino dijo que responsabilizan a la administración de EEUU por la ocupación del pueblo palestino y lo consideran un socio clave en las acciones y decisiones de Israel contra los derechos de su gente.

Abbas: Palestina ya no está limitada por los acuerdos israelíes y estadounidenses

El presidente palestino, Mahmoud Abbas, dijo el martes que el país está terminando todos los acuerdos y entendimientos firmados con Israel y Estados Unidos, incluso en temas de seguridad.

Abbas hizo el anuncio en una reunión de líderes palestinos en Ramala. La decisión se produjo en respuesta a la propuesta de anexión israelí de partes de Cisjordania.

"La Organización para la Liberación de Palestina y el Estado de Palestina están absueltos, a partir de hoy, de todos los acuerdos y entendimientos con los Gobiernos de Estados Unidos e Israel y de todas las obligaciones basadas en estos entendimientos y acuerdos, incluidos los de seguridad", dijo.

Abbas dijo que responsabilizan a la administración estadounidense por la ocupación del pueblo palestino y lo consideran un socio clave en las acciones y decisiones de Israel contra los derechos de su pueblo.

"La autoridad de ocupación israelí, a partir de hoy, tiene que asumir todas las responsabilidades y obligaciones frente a la comunidad internacional como una potencia ocupante sobre el territorio del Estado ocupado de Palestina, con todas sus consecuencias y repercusiones basadas en el derecho internacional y la ley humanitaria internacional", dijo.

Se espera que Israel lleve a cabo la anexión el 1 de julio, según lo acordado entre el primer ministro Benjamin Netanyahu y Benny Gantz, el jefe del partido Azul y Blanco.

Los funcionarios palestinos han amenazado con abolir los acuerdos bilaterales con Israel si continúa con la anexión, lo que socavará la solución de dos Estados.

El plan surge como parte del llamado "Acuerdo del Siglo" del presidente de EEUU, Donald Trump, que se anunció el 28 de enero, que se refiere a Jerusalén como "la capital indivisa de Israel" y reconoce la soberanía israelí sobre gran parte de Cisjordania.

El plan exige el establecimiento de un Estado palestino conectado por puentes y túneles.

Funcionarios palestinos dicen que según el plan de EEUU, Israel anexará 30% o 40% de Cisjordania, incluida toda Jerusalén Oriental.

El plan ha suscitado críticas generalizadas del mundo árabe y fue rechazado por la Organización de Cooperación Islámica, que instó a "todos los Estados miembros a no comprometerse con este o cooperar con la administración de EEUU para implementarlo de cualquier forma".